London, 28 de junio. El cielo está nublado pero no importa. Hyde Park, Speaker's Corner. Un grupo de 20 mujeres se reunen para correr y decir NO al cáncer infantil. Los libros de Femenino sin Límites (Iolanda López) y Mujeres que corren (Cristina Mitre) se unen para seguir gritando que se podrá con el cáncer. Hay que seguir recogiendo fondos para la investigación de esta cruel enfermedad. Cristina habla de su proyecto live and run y de Uno entre cien mil , yo presento qué es Femenino sin Límites, Deporte en Femenino y explico cómo me he hecho maratoniana y triatleta venciendo miedos, esfonzándome por la ayuda a los enfermos de Cáncer. Recuerdo a los peques de Afanoc y a la Fundación Josep Carreras, em mi mente otras personas que ya no están.
Empezamos a correr, 10km como objetivo por un parque repleto de runners que se mojan, llueve pero no importa. Las conversaciones mientras corremos surgen fácilmente. Jimena explica que está en Londres después de un duro periodo personal por una pérdida de un ser querido. Toscana se mudó a la ciudad, con su pequeña niña y su marido para buscar un futuro mejor. Las historias de superación personal cogen un protagonismo mientras los kilómetros van aumentando. Yo no dejo de pensar, ¿qué nos une?, ¿qué ha hecho que hoy estemos aquí? Doy las gracias por no estar sola, por tener gente que apoya cualquier proyecto que pasa por mi cabeza.
Debemos estar en el km 7, siguen apareciendo nuevas historias. Observo a Sonia, hoy se ha vuelto a vestir de runner después de 4 meses para
apoyar el acto, sé que está sufriendo, lo veo en su cara pero cuando coinciden nuestras miradas sonríe y aplaude. Miro a Patricia, pienso si el ritmo es muy elevado para ella, si le puede repercutir negativamente, pero ella sigue el ritmo con ilusión, con esfuerzo pero se le ve muy entera, parece muy feliz.
apoyar el acto, sé que está sufriendo, lo veo en su cara pero cuando coinciden nuestras miradas sonríe y aplaude. Miro a Patricia, pienso si el ritmo es muy elevado para ella, si le puede repercutir negativamente, pero ella sigue el ritmo con ilusión, con esfuerzo pero se le ve muy entera, parece muy feliz.
Todo parece fácil. Paramos después de 10km con algún rayo de sol y con una incipiente lluvia al principio. Nos abrazamos expontáneamente. Hacemos algunas fotos y compartimos qué maravilloso es este deporte que se llama correr. Dinero recogido para los proyectos...y la vida sigue para todas...sigamos corriendo para pensar y sentir que podemos.
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