lunes, 30 de octubre de 2017

La Foto del Martes: Dio vueltas durante un rato a su propio pasado...

Dio vueltas durante un rato a su propio pasado, 
buscando a tientas en todos los recovecos de su memoria, 
no fuera que por casualidad saltara como un resorte alguna antigua iniquidad y saliera a la luz. 
Su pasado era bastante irreprochable; pocos hombres podían consultar los anales de su vida con menos recelo; 

Sin embargo se sentía profundamente humillado por las muchas malas acciones que había cometido, y exaltado de nuevo hasta una sobria y temerosa gratitud por las otras muchas que había estado a punto de cometer y había evitado.

R.V Stevenson

Mirar atrás para aprender de todo aquello que no queremos volver a repetir, 
sólo por eso...


 Photo by: Bo Yu

jueves, 26 de octubre de 2017

Post del Viernes: Fatiga de la DECISIÓN

Y es que decidir fatiga, cansa, desgasta. Decidimos y volvemos a decidir por el cúmulo de información que nos llega y por todo lo que vivimos y nos sucede. En nuestra mente se mezclan opciones y variables con las que tenemos que convivir, sin que a veces queramos hacerlo y otras muchas sin saber qué hacer con ellas. A la situación de estrés que puede llegar a aparecer por la necesidad de decidir se le domina "Fatiga de la decisión" o Síndrome de la fatiga de la decisión.

Decidir es necesario pero la "sobre-exposición" a ello nos puede llevar a tomar malas decisiones, generar un alto nivel de estrés y elegir respuestas poco racionales.

¿Has pensado alguna vez la cantidad de decisiones que tomas en un día? Seguro que muchas de ellas son casi insconscientes y rutinarias: a qué hora te levantas, qué ropa eliges para ir a trabajar, qué comes, qué compras en el super,  qué trabajos haces cada día, qué actividades eliges hacer cuando tienes algo de tiempo libre, etc.

Esta semana me preguntaba: ¿todas las decisiones que tomamos deben tener el  mismo nivel de intensidad? y una siguiente cuestión: ¿Todas tienen la misma importancia? Y he llegado a la conclusión de que NO. Por ejemplo: no es igual la energía que necesitamos para elegir qué desayunamos que la que implica decidir si debemos cambiar o no de trabajo. Las decisiones nos desgastan pero no pueden "controlar" todo lo que hacemos sino nos desgastan, asustan y paralizan.

Estudios en el campo de la Psicología demuestran que las decisiones más favorables se producen cuando estas se realizan cercanas a las horas de descanso, especialmente a primeras horas de la mañana y después de un buen almuerzo. Así, las horas de descanso y de receso son importantes paras recuperar nuestra energía mental y pensar con más claridad. 

Durante estos días que le daba vueltas a este aspecto, me auto-analizaba y he podido constatar que cuando disminuye mi nivel de energía tengo mucha más dificultad para controlar mi "actividad mental", costándome procesar la información y a veces hasta siendo incapaz de responder a un WhatsApp, obstaculizándose mi capacidad para tomar buenas decisiones.
¿Qué hago yo para recuperar la energía y la capacidad para decidir? Acciones que vuelven a "llenar" mis depósitos cerebrales:

- Intento dormir las horas que sé que me permiten recuperar bien.

- Tiendo a posponer las decisiones importantes a momentos en los que me encuentro más fuerte.


- Elijo muy bien la información a la que me quiero exponer (qué leer y escuchar, por ejemplo) evitando  el consumo excesivo de la misma.

- Dedico tiempo a la meditación diaria y al ejercicio físico.


- "Tiro" de fuerza de voluntad e intento "auto-dominar" presiones innecesarias, sin malgastar energía en resolver crisis sino intentándolas evitar.


- Intento dominarme cuando algo parece que se me va de las manos. Roy Baummeister, profesor de psicología de la Florida State University, afirma: “Observa cualquier gran problema que la gente sufre hoy y lo más probable es que el autocontrol esté implicado de alguna manera”.

Decidir, decidir y volver a decidir, con cabeza y corazón, cuando te sientes preparado para ello...Y así entonces acabo pensando que a lo mejor es verdad cuando se afirma que ser feliz es cuestión de voluntad y de buenas decisiones...

Buen fin de semana de buenas decisiones para tod@s!

lunes, 23 de octubre de 2017

La Foto del Martes: ¡Yo también adoctrino!


ADOCTRINAR: inculcar a alguien unas determinadas ideas o creencias.

A los docentes se nos ha acusado de adoctrinar en nuestras aulas.
Quiero responder a esta acusación:
 en...

En el amor por la diferencia.
En el respeto por quien piense diferente.
En la unidad de proyectos.
En la no violencia.
En el respeto por el más débil.
En la magia que tiene jugar.
En la importancia que tiene vivir en paz.
En la necesidad de estar bien formados.
En el respeto por los más mayores.
En la alegria de vivir.
En la necesidad de saber responder con palabras a quien nos ofende, nunca con la fuerza.
En la posibilidad de creer en un mundo más acogedor para todos.
En la ilusión de que algún día nadie será mejor que nadie.
En el positivismo.
En la igualdad de oportunidades.
En la curiosidad.
En la equidad.
En el amor por la cultura: libros, música, danza, pintura...
En la inclusividad.
En la espontaneidad.
En la responsabilidad y los deberes.
En el deseo que la diferencia siempre sume.
Exijo como MAESTRA, LOGOPEDA y PSICOPEDAGOGA que se respete nuestra labor y pido que se nos deje aparte en los conflictos políticos.
Yo ADOCTRINO por un futuro más respetuoso para TOD@S.

jueves, 19 de octubre de 2017

Post del Viernes: ¡Cambia tu vocabulario!

¿Cómo convencerse que la vida es más sencilla de lo que parece?

Hay palabras y expresiones que nos llevan a realizar interpretaciones inútiles y disruptivas que nos alejan de nosotros mismos y de los demás, que nos llevan a buscar aquello que nos diferencia y no lo que nos une, palabras que tendrían que desaparecer de nuestro vocabulario. 

Hay vocablos que la gente escribe, pronuncia con mucha facilidad o que yo misma digo en ocasiones que me hieren, que no aportan sino que únicamente restan, nos empequeñecen y limitan. Son palabras que no me gustan porque mis oídos las rechazan cada vez más  y  mi mente tiende a buscar otras que puedan sustituirlas. Si cambiamos nuestro vocabulario, cambiamos nuestra percepción de la vida. Así me he aventurado a escribir la lista de "substituciones" que intento aplicar...por si puede dar que pensar y "decir"a otros...

Cambia...

Lucha por trabaja
Resiste por persevera
Pelea por participa
Éxito por felicidad
Fracaso por intento...

Todos los hacen por yo quiero hacerlo
Me gustaría tanto por lo intento
Parcela por holístico
Imposición por propuesta
Dócil por crítico
Obligación por deseo
Inmediatez por mejora de resultado
Desgana por pasión
   Copia por integridad
Mala suerte por inconveniente

Porque  Somos...

Somos lo que decimos y expresamos
Somos lo que sentimos
Somos lo que comemos
Somos lo que pensamos

...Pero No lo que hacemos

Buen fin de semana con bonitas palabras para tod@s!

lunes, 16 de octubre de 2017

La FOTO del Martes: Vivimos la vida como la imaginamos...

Vivimos la vida que imaginamos...

Vivimos la vida como la imaginamos y nuestra imaginación e interpretaciones marcan y eligen donde ponemos la atención: interpretar, interpretar y volver a interpretar...

Nuestra actitud mental marca nuestra vida.
Nos familiarizamos con nuestros pensamientos y los acabamos viendo como normales y acabamos preguntándonos:
 ¿por qué no todos piensan como yo?

Acabamos convirtiéndonos en lo que pensamos
y tal como pensamos construimos nuestros mundo.


Así...¿qué hacer?
Eduquemos la mente inestable, aumentemos los procesos de discernimiento y vivamos sin miedo.
"Ataquemos los problemas" a partir de la aproximación directa observando y valorando.
Pensemos e imaginemos cómo queremos vivir.
Soñemos a lo grande...¡porque alguien dijo que somos lo que soñamos!

Photo by Mahesh Balasubramanian 

jueves, 12 de octubre de 2017

Post del Viernes: Cuando se alargan las sobremesas...

Releyendo un cuento de Joan Barril me doy cuenta que cuando te gusta  alargar las sobremesas es que has llegado a la edad adulta. Y es así, el tiempo pasa y lo hace rápido.

Cuando era sola una niña esperaba a que me autorizasen a levantarme de la mesa (hoy algo difícil de entender...eran otros tiempo). Los niños y niñas escuchábamos las conversaciones que mantenían los adultos, algunas veces entendiendo de lo que hablaban y otras veces creyendo que habían cambiado de idioma. No teníamos nada en las manos (ni móviles ni tablets ni mirábamos ninguna pantalla)  mientras padres, tíos, abuelos y amigos hablaban entre sí, mirándose a las caras, riendo o discutiendo, pero dedicando la máxima atención al momento. En aquellas conversaciones oí hablar de literatura, de política, de pintura y deporte, de viajes, de economía...la base cultural que me ayudó a descubrir que el mundo es diverso, complicado y maravilloso a la vez. Después del tiempo de espera que establecían los anfitriones recibías la consigna: Ya os podéis levantar...y dando las gracias empezaba un espacio de juego, de lectura o de televisión.

Ahora soy yo la que espero estas sobremesas con cierta impaciencia...porque se hace difícil tener tiempo para disfrutarlas. Ahora soy yo la que en ocasiones autorizo a los más pequeños a abandonar la mesa. Ahora soy yo la que intervengo en conversaciones que hablan de lo que pasa en el mundo, de los libros que estoy devorando o deseo leer, o del último viaje que me ha marcado y transformado. Ahora soy yo la que escucha con interés una exposición de ideas que me interpela y me invita al discernimiento. Ahora soy yo quien piensa que quizás hablamos en otro idioma.

En las sobremesas vuelvo a ser yo: me relajo, pregunto a los demás como están y expreso cómo estoy yo, qué opinan sobre algún tema. En ellas nacen nuevos proyectos y mueren otros. En ellas las palabras viajan por el aire a veces con suavidad y otras con dureza, las miradas acarician y las risas te hacen dar cuenta de lo sencilla que podría ser siempre la vida. En ellas descubro que aquel que pensaba como yo ahora ya no lo hace interpelándome qué ha podido suceder, valoro las preguntas que me hacen reflexionar, escucho y aprendo con devoción, viajo cerrando los ojos con los viajes que han hecho otros. Me doy cuenta que para poderlas disfrutar sólo se necesita una cosa:  TIEMPO . Tiempo del bueno, tiempo sin prisas, tiempo sin interpretaciones, tiempos con respeto, tiempo de calidad, tiempo de confidencias...

Me gusta empezar con "qué bien volver a estar juntos" y "cómo te va la vida" y finalizar con "esto hay que repetirlo más amenudo"...hasta que alguien vuelve a decir: "Sí, pero falta tiempo".
¡Busquémoslo! Porque esto es lo que yo creo que es realmente vivir ...

¡Buen fin de semana de largas sobremesas para tod@s!



lunes, 9 de octubre de 2017

La Foto del Martes: Asumir la ignorancia...

Asumir la ignorancia ...
No sé qué va a ocurrir
No sé que voy a hacer
No tengo el control
No sé cuando va a finalizar una cosa
No sé cómo me irá
No sé qué pasará
No sé si estaré preparado

Impedimos tantas cosas...
Por controlar
Por miedo 
Por ansia 
Por ego
Por egoismo

Asumir que no tengo que saberlo todo, que no tengo porqué hacer todo bien es asumir que me ignorancia me puede llevar a nuevos lugares que nunca había imaginado, a surfear acontecimientos, a lanzarme sin pensar...
¡Bendita Vida, bendita ignorancia!

                                                                Photo by Rui Caria

jueves, 5 de octubre de 2017

Post del Viernes: ¡Dejar de interpretar!

Uno de los aspectos que más me están costando aceptar desde mi vuelta de New Zealand es darme cuenta de la tendencia que tenemos las personas a hacer interpretaciones. Quizás antes no era del todo consciente, ahora lo soy mucho.

Con tranquilidad y cierta alevosía somos capaces de interpretar lo que hacen los demás llegando a conclusiones que son creadas por nosotros mismos y afirmando cosas que pueden llegar a ser no verdad. Interpretamos sin preguntar, nos atrevemos a interpretar aspectos básicos de la vida de los demás. Sin temor hacemos afirmaciones sobre: cómo es el otro, qué sabe o no sabe hacer, qué necesita, qué puede hacer por nosotros, qué habilidades o conocimientos posee, ...un sin fin de interpretaciones que muchas de ellas son erróneas y que modifican nuestra realidad robando confianza hacia lo que vemos y vivimos.

¿Y si dejásemos de hacerlo? ¿Qué sucedería? La respuesta es bastante obvia: veríamos la vida y a los demás con mucha transparencia a través de una mirada más infantil, más inocente y blanca, desde la gratitud y sin condiciones. Confiaríamos más, no dudaríamos tanto, ganaríamos en tranquilidad, nos desprenderíamos de cargas inútiles, expresaríamos con más naturalidad y seríamos más honestos. Muchas razones para no empezar a intentarlo.

Si dejásemos de interpretar quizás la vida sería más sencilla para todos...

Buen fin de semana sin interpretaciones para tod@s!


lunes, 2 de octubre de 2017

La FOTO del Martes: La VIOLENCIA es injustificable

La VIOLENCIA es injustificable!

La VIOLÈNCIA és injustificable!

VIOLENCE is injustifiable!

NO Más violencia!

Hablemos, dialoguemos, busquemos una solución...porque  el pasado nos enseñó que la falta de diálogo no soluciona nada.
¿Los seres humanos no hemos aprendido nada de todo lo que nos ha sucedido a lo largo de la historia?
Por un mundo donde TODA persona pueda expresarse libremente.
Por un mundo donde podamos opinar TODOS lo que pensemos.
Por un mundo donde la diversidad sume.
Por un mundo sin VIOLENCIA.