Leo y reflexiono sobre el momento educativo que estamos viviendo y me entristece constatar que los que nos dedicamos a esta preciosa profesión, la de educar y acompañar, no somos capaces de ponernos de acuerdo sobre qué queremos conseguir y cómo hacerlo.
Los "más innovadores y modernos" atacan a los que no lo son porque no utilizan un I-pad en sus clases. Los más "tradicionales" arremeten a los demás porque se está perdiendo el sentido de todo y el uso de tanta innovación está despersonalizando la educación. Nos perderemos en las formas y nos olvidamos del fondo, de lo que realmente es importante.
Ayer mismo leía un precioso texto-declaración de Patricia Rodríguez, maestra, psicopedagoga y logopeda @marato2011 y pensé que todas las ideas que bailaban en mi mente durante estos meses quedaban perfectamente resumidas en él. Transcribo el preciso texto de Patricia, con su autorización, un escrito que se convierte en un poema reflexivo y esperanzador.
La escuela que yo quiero...
Yo quiero una escuela que transforme la sociedad y no que se adapte a ella.
Quiero que sea un motor de cambio donde exista un equilibrio entre el saber, el saber hacer, el saber pensar, el sentir y el ser.
Creo en mis alumnos.
Creo en una educación tradicional e innovadora, creo en una educación que no divida sino que una.
Creo en una educación desetiquetada.
Creo en una educación libre de creencias limitantes entre lo que es mejor o peor.
Creo en una escuela consciente del momento histórico que le toca vivir y esperanzada, sin querer competir ni compararse.
Quiero que sea un motor de cambio donde exista un equilibrio entre el saber, el saber hacer, el saber pensar, el sentir y el ser.
Creo en mis alumnos.
Creo en una educación tradicional e innovadora, creo en una educación que no divida sino que una.
Creo en una educación desetiquetada.
Creo en una educación libre de creencias limitantes entre lo que es mejor o peor.
Creo en una escuela consciente del momento histórico que le toca vivir y esperanzada, sin querer competir ni compararse.
Creo en los docentes con los que he trabajado, grandes profesionales todos ellos.
Creo en la persona y sus posibilidades.
Es necesario que dejemos de luchar entre lo que es innovador y lo más tradicional, es necesario que la mirada pedagógica ayude a unir lo mejor de todos para educar en libertad.
Creo que la educación es un camino que no hacemos solos, seamos de la "escuela" que seamos...
Como ya decía Martí y Pol:
Creo en la persona y sus posibilidades.
Es necesario que dejemos de luchar entre lo que es innovador y lo más tradicional, es necesario que la mirada pedagógica ayude a unir lo mejor de todos para educar en libertad.
Creo que la educación es un camino que no hacemos solos, seamos de la "escuela" que seamos...
Como ya decía Martí y Pol:
"Todo está por hacer y todo es posible"
Unamos ideas, debatamos juntos con respeto, escuchemos otras propuestas, crezcamos unidos hacia un futuro educativo donde TODOS encontremos nuestro lugar...
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