jueves, 21 de enero de 2016

Post del Viernes: Cuando la GENIALIDAD y la DIFERENCIA molestan...

Educar es una palabra maravillosa si se entiende bien su significado. Supone la capacidad de guiar o conducir a una persona o grupo hacia la adquisición de un conocimiento para que pueda dar el máximo de sí misma, partiendo de cómo es y qué sabe. ¿Parece sencillo no? Pero NO lo es.

Soy maestra y me gusta serlo. Si hay algo que me obsesiona en el día a día de ejercer mi profesión es poder ser una docente con capacidad para guiar y acompañar a mis alumnos para potenciar su máximo desarrollo como personas y estudiantes. Me esfuerzo en crear un ambiente motivador y gestionar recursos y habilidades para que cada uno de ellos dé lo mejor de sí mismo, conociendo y respetando sus características, necesidades e intereses. Repito, parece fácil, pero NO lo es.

Si miro hacia el tiempo donde ejercía el rol de "estudiante" tengo que reconocer, a mi pesar, que no recuerdo a muchos profesores de mi infancia y juventud que fuesen grandes guías pero los que vienen a mi cabeza me gustaría encontrármelos para decirles: GRACIAS. Gracias por conocerme, por respetarme, por no quererme cambiar, por guiarme. Gracias por estimular lo que más me gustaba, por reforzar mis sueños, mis intereses y estimular de nuevos, por exigirme, por abrirme nuevos caminos. Gracias por no transformar la educación en un puro proceso de transmisión de conocimientos y contenidos sin sentido y vacíos de significado. Gracias por no obligarme a ser como los demás, favoreciendo mis genialidades, mis dones, mi inteligencia y no incidir únicamente en mis dificultades y errores sino por tener la capacidad para crear puentes hacia mis fortalezas. Ahora me doy cuenta que todos ellos tenían una cosa en común: huían de la homogeneidad y apoyaban la diferencia. Eran personas capaces de vernos con una mirada y respeto diferente a muchos otros.

La homogeneidad, el gran enemigo de la sociedad actual,  se busca en la empresa, en la escuela, en las familias. Lo que es diferente sigue molestando e incomodando. Me sorprende descubrir a personas que dedican toda su energía diaria a tapar o anular lo que no es igual, lo que se sale de la "norma", para que todo a su alrededor sea controlable, y homogéneo; con la diferencia se sienten atacados e incómodos. 
¿Y qué consiguen con esto? Matar lo que es diferente y con ello la genialidad y el desarrollo creativo. ¿Quién pierde con esta situación? La persona que recibe este acoso y la sociedad en general, ya que no puede "beneficiarse" de las genialidades y capacidad de estas personas.

Creo que lo incoherente en apariencia tiene su coherencia interna pero hay que descubrirla. La genialidad es uno de los grandes recursos desaprovechados porque a veces ha sido ocultada y hasta perseguida. ¿Qué sería de nosotros sin un Picasso, un Dalí, un Edison? En el  Sistema Educativo actual lo diferente, el alumno que tiene otra forma de pensar, de contestar, de formularse preguntas, que posee un coeficiente elevado o un talento notorio le es difícil encontrar su sitio en el sistema. Los discentes que presentan unas características y necesidades que le hacen salir de la gráfica de lo "normal" molestan e incomodan.. ¿Qué hacer con ellos? Su talento, su creatividad, su coeficiente intelectual se ve como algo que hay que ocultar. En los casi 20 años que llevo ejerciendo como docente lo he podido constatar en muchas ocasiones y esto me asusta y entristece. Un gran problema es que el profesorado no está formado para saber qué hacer con ellos. No se apoya su diferencia sino que indagamos hasta descubrir qué hacen mal para sentirnos más tranquilos, "no es tan bueno" nos decimos, "hace alguna falta" y así respiramos con más tranquilidad.Se les niega su genialidad con test que evalúan todo lo que no tienen que evaluar y se les trata con cierta indiferencia e incluso hostilidad. Confundimos la genialidad con "ser muy listo y no equivocarse nunca" y genialidad o alta capacidad es poseer una gran nivel de perseverancia, de coraje, de concentración, de creatividad, de determinación..., es mucho más que tener un Coeficiente Intelectual superior a 130.

En la educación y en la vida no todo es lineal y por ello debemos huir de la igualdad y substituirla por la equidad permitiendo seguir a cada persona procesos y caminos distintos con igualdad de oportunidades. Crear en el aula dinámicas no lineales permite dar espacio a todos los alumnos, alumnos con capacidad diferente para percibir y entender el mundo, para descartar y analizar datos, con métodos de resolución de problemas originales distintos a los que estamos familiarizados. 

La búsqueda de la igualdad lleva a lo controlable y si todo es controlable no hay creatividad. Sin creatividad no hay genialidad. Sin genialidad no hay avance y todos pasamos en ser "iguales" y "grises", y se pierde la pasión . Y sin pasión ¿se puede aprender?
Por una educación donde todo sume, todo se valore, todo tenga su espacio y su voz, donde la diferencia sea un regalo y no una dificultad. Por una EDUCACIÓN diferente.

Buen fin de semana a tod@s!


"La mediocridad no conoce nada superior a sí misma, pero el talento instantáneamente reconoce genios"


Arthur Conan Doyle

2 comentarios:

  1. Muchísimas gracias por este post tan GeNIAL!!, Tan inspirado y tan cierto. Ser diferente en realidad es una condición común a todos, TODOS somos ÚNICOS. El problema es que sólo algunos se atreven a SeR. La clave es perder el miedo a la NO ACEPTACIÓN. Nos educan para ser convencionales, para no salirnos de las normas, para ser como se espera que seamos. Pero SeR implica atreverse a ser diferente. Gracias por este post. Hoy sumo energía roja contigo Iolanda López Iglesias.

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  2. Muchas gracias Natalia! Gracias por tus palabras y creer que en el mundo hay sitio para todos! Por una vida más respetuosa para todos!

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